El informe del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico sobre la Virgen de la Estrella
Como se ha venido informando en el Boletín de la pasada Cuaresma, en la Hoja Informativa de octubre de 2.008 y puntualmente desde la página WEB de la Hermandad, el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, institución que se ha consolidado como referente internacional en el ámbito del patrimonio cultural, ha atendido con sumo interés la petición formulada por la Junta de Gobierno, de realizar un estudio del estado de conservación de la Imagen de María Santísima de la Estrella, todo ello desde la normal preocupación por el mantenimiento del más importante patrimonio que nuestra Hermandad atesora, como son sus Sagradas Imágenes Titulares.
Por tal motivo, técnicos del Centro de Intervención del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico se desplazaron el día 17 de octubre de 2.008 a la Casa Hermandad para realizar un reconocimiento “in situ” de la Imagen, utilizando medios técnicos como iluminación normal y ultravioleta, análisis de la policromía con lente de 60 x. o toma de fotografías. Posteriormente, el 29 de Octubre de 2.008, el técnico en medios físicos de examen del Centro, se personó nuevamente para asesorar en la realización de un estudio radiográfico practicado a la Talla de Nuestra Señora con un equipo portátil de radiología. Paralelamente se ha ido aportando desde la Hermandad documentación referente a datos históricos de la Corporación, de sus distintos cambios de ubicación; así como de la restauración de la Virgen llevada a cabo en el año 1.977 por el profesor Peláez del Espino, fotografías anteriores a dicha restauración, incluso testimonios de hermanos que presenciaron esa o cualquiera intervención que se hubiera realizado a la Imagen.
El resultado de todo ello se ha materializado en un completo “informe diagnóstico y propuesta de intervención de la Virgen de la Estrella” con que actualmente cuenta la Hermandad, redactado por un equipo técnico multidisciplinar integrado por restauradores, historiadores del arte y fotógrafos, supervisado por el Jefe del Centro de Intervención en el Patrimonio Histórico, D. Lorenzo Pérez del Campo, integrantes todos ellos del citado Centro dependiente de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.
Dicho informe consta de cinco apartados más un anexo de documentación gráfica, a saber: 1.- Identificación del bien; 2.- Historia material; 3.- Diagnóstico y propuesta de intervención; 4.- Recomendaciones de mantenimiento; 5.- Recursos, presupuesto y plazos de ejecución.
Sobre la historia material de la Imagen de María Santísima de la Estrella, el estudio llevado a cabo procura vincular las distintas circunstancias históricas acaecidas en la Hermandad con la probabilidad de realización de la Talla de la Virgen, dada la controversia sobre su fecha de ejecución. Coincide con la atribución tradicional a Juan Martínez Montañés así como con una de las que últimamente circula con más aceptación: la de Luisa Roldán y Villavicencio (La Roldana). Además, el informe histórico abre nuevas vías de investigación, relacionándola en todo momento con escultores de primera línea de cada momento artístico. No obstante, se pone de manifiesto la necesidad de un mayor estudio de la Imagen, todo ello mientras que no aparezca un documento que corrobore su autoría.
Respecto del diagnóstico de la Imagen, éste se divide a su vez en dos apartados, el que se refiere a la policromía y el análisis que se hace del soporte.
Los estudios realizados sobre la policromía de la Talla de la Virgen ofrecen resultados bastante optimistas, especialmente en lo referente al rostro y cuello, donde se revela una policromía antigua de alta calidad, con un fino cuarteado en superficie que sigue la línea longitudinal de la disposición de la veta de la madera, deduciéndose que puede existir sólo esa capa de policromía general en las carnaciones. Sí se advierten multitud de pequeñas pérdidas de policromía en la cabellera, producto de los arañazos producidos por los alfileres que se utilizan en las tareas de vestir la Imagen. En las manos, de las que se dice que presentan una uniformidad estética con la policromía del rostro, se señalan algunos desgastes, repintes muy puntuales y suciedad repartidos por distintas zonas de los dedos, así como ciertas lagunas de policromía, si bien las más preocupantes se localizan en las palmas de las manos.
La conclusión a la que se llega referente a la policromía de la Imagen de María Santísima de la Estrella es que en razón de su calidad artística, de los valores históricos y devocionales de la obra, así como del actual estado de conservación de la Talla, su mantenimiento está asegurado, aún en el caso de que los análisis de laboratorio reflejaran otra policromía debajo de la actual. Por lo que no sería necesario intervenir a este respecto en las zonas visibles de la talla, salvo la consolidación de las pérdidas localizadas en las manos, para que estas no fueran a más y la reparación de los arañazos provocados por los alfileres. Sobre esto último, en el apartado de “recomendaciones de mantenimiento”, se aconseja la confección a medida de una protección realizada en cuero para la policromía de la cabeza (cabellera), zona escapular y torso, que no dejara traspasar los alfileres durante las labores de vestir la Imagen.
Distinto resultado se desprende del análisis del soporte, o constitución interior de la Talla, cuyas alteraciones principales están en gran medida relacionadas directamente con las intervenciones de las que ha sido objeto, especialmente la restauración sufrida en 1.977, además de los problemas provenientes del envejecimiento propio de los materiales. La conclusión del técnico es clara ante la necesidad de intervenir a la Imagen para su mejor conservación y mantenimiento, aunque en todo caso, la apreciación exterior de la Virgen permanecería inalterable.
La Talla de María Santísima de la Estrella posee en la actualidad un candelero metálico producto de la restauración del profesor Peláez. La propuesta de intervención presentada aconseja la sustitución del mismo por otro de idénticas características morfológicas pero realizado en un tipo de madera con alta resistencia al ataque de insectos, de modo que funcional y formalmente corresponda mejor a la Imagen de la que se trata. Se colocaría un nuevo sistema de agarre del torso al candelero, que aumente la seguridad de la Talla ante cualquier emergencia y se sustituiría el actual sistema de articulaciones en manos, hombros y codos por uno denominado de “fosa y bola”. Esto último, además de mejorar el movimiento y sujeción de los brazos, resulta primordial dado que el actual sistema está produciendo daños en el soporte, especialmente en las muñecas de las manos, donde se llegan a percibir fracturas provocadas por la articulación existente. Como puede deducirse fácilmente, toda esta intervención del soporte no supondría ningún cambio que exteriormente se pudiera percibir, siendo sin embargo fundamental para la conservación de la Imagen.
De la comparación de las antiguas radiografías realizadas a la Virgen con las nuevas, se descubre que en la restauración que Peláez le realiza en el año 1.977, se introduce un perno de metal roscado desde la cabeza, continuando a lo largo de todo el torso hasta salir al exterior por la zona baja para atornillarse al candelero. Esta circunstancia, nos consta, es la que ha provocado mayor complejidad en la elaboración del informe, en el cual se expresa que la decisión definitiva sobre la actuación a realizar con respecto a este perno queda supeditada a un mayor estudio e información radiológica de la Imagen, hasta tener un mejor conocimiento del daño que esté realizando en el soporte para evaluar la necesidad o no de su retirada.
El informe diagnóstico concluye con una serie de recomendaciones de mantenimiento de la Imagen, para garantizar que no aparezcan nuevos daños relacionados con el soporte y la policromía ; los datos referentes a la valoración económica de la intervención propuesta, cuyo presupuesto lo sufragaría el IAPH prácticamente en su totalidad; así como la estimación de un plazo de veinte semanas para la correcta formulación y ejecución de los trabajos descritos. Este plazo que, a priori puede parecernos excesivo, dado que en ningún momento se está considerando una restauración compleja por el diagnóstico efectuado, responde a un plazo máximo de intervención, redundando en un mayor análisis y estudio de la Talla, lo que garantiza el mejor resultado posible para ésta. En todo caso, la restauración de la Imagen de María Santísima de la Estrella en el Centro de Intervención en el Patrimonio Histórico conllevaría la creación de una Comisión desde la Hermandad, a la que le competería cualquier decisión que tuviera que tomarse sobre la misma.
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